ADOLESCENCIA
Años después, el mayor anhelo de Bastidas era entrar a la Unidad Educativa Daniel Reyes, en Ibarra, pero su pobreza se lo impedía. Por suerte, la mano solidaria del Profesor Bolívar Cerón le ayudó con la inscripción.
Ya en el colegio, Bastidas tuvo la necesidad de trabajar para costear los gastos necesarios. Fue así que compró un cajón para lustrar zapatos.
